ANÁLISIS SOBRE UNA BUENA PRÁCTICA PARA FAVORECER LA IGUALDAD DE TRATO Y LA NO DISCRIMINACIÓN
Plan de
Inserción Laboral para víctimas de violencia de género y mujeres en riesgo de
exclusión social del Ayuntamiento de Valladolid
1- PRESENTACIÓN DE LA BUENA PRÁCTICA
La buena práctica
que he elegido pertenece a una administración local, en concreto, al Ayuntamiento
de Valladolid. Se trata de un plan de inserción laboral para mujeres en riesgo
de exclusión social por causas de género y víctimas de violencia de género.
El programa del Ayuntamiento de
Valladolid, pionero en Castilla y León, se
ha desarrollado entre los años 2017 y 2021, y ha tenido como objetivo principal
que las mujeres que han sufrido malos tratos o cualquier tipo de violencia de
género se empoderen y puedan encontrar un puesto de trabajo.
La duración inicial era de dos años,
sin embargo, los datos positivos obtenidos en ese periodo, llevaron al Ayuntamiento
de Valladolid a continuar con esa línea de actuación, aprobando una primera
prórroga para el año 2019 y otra más para los años 2020 y 2021.
El desarrollo de
este Plan se financió con cargo a los presupuestos de la Concejalía de
Educación, Igualdad, Juventud e Infancia del Ayuntamiento de Valladolid, si
bien desde el año 2019, también se financió con cargo a los fondos del
Ministerio de Igualdad para el desarrollo del Pacto de Estado en materia
de violencia de género.
Este Plan fue galardonado por la
Federación Estatal de Municipios y Provincias (FEMP) en 2018 como una buena
práctica.
2- ÁMBITO EN QUE ACTÚA LA BUENA PRÁCTICA
La población destinataria son mujeres en riesgo de exclusión social por causas de género y violencia de género en sentido amplio: discriminación por LGTBI, mujeres prostituidas, familias monomarentales, víctimas acoso/agresiones sexuales, rechazo por ser mujer en minorías étnicas...
Los objetivos son
visibilizar y promover una imagen no estereotipada en el mercado laboral de las
víctimas de violencia de género y prevenir su discriminación en el empleo, así
como facilitar su inclusión social e inserción laboral trabajando en la mejora
de su empleabilidad.
Se implementa a
través de 5 líneas, tanto en sesiones individuales como grupales con
el objetivo de incrementar la empleabilidad de las usuarias:
- ü Coaching y apoyo psicosocial.
- ü Asesoramiento y mejora de la propia imagen
personal.
- ü Consultoría y acciones formativas jurídicas.
- ü Prospección, formación (certificado de
profesionalidad) y elaboración de itinerarios laborales.
- ü Formación en competencias sobre identidad digital
y herramientas tecnológicas de búsqueda activa de empleo.
Como mecanismo de
apoyo a la participación en el Plan de Inserción Laboral se puso a disposición
de las participantes un servicio de respiro para la atención de necesidades de
cuidado de menores a su cargo con un servicio de canguros.
3- IMPACTO Y RESULTADOS QUE HA TENIDO
La primera fase
del Plan se desarrolló en el último trimestre de 2017 y participaron veinte
mujeres, de las que la mitad encontraron trabajo. En cuanto a la segunda fase,
desarrollada a lo largo del año 2018, encontraron trabajo once de las
veinticinco personas participantes.
En el año 2019 participaron noventa
personas, de las que 59 finalizaron los correspondientes itinerarios y 33 se
insertaron laboralmente. Ocho de ellas obtuvieron el certificado de
profesionalidad de Atención Sociosanitaria a Personas Dependientes en
Instituciones.
Entre enero de 2020 y junio de 2021 se atendió a 141 mujeres que recibieron información, orientación y asesoramiento personalizado para mejorar su empleabilidad. En esta última fase del Plan se insertaron un total de 26 mujeres con contrato con muchas perspectivas de que las mujeres que consiguieron su certificado de profesionalidad de atención sociosanitaria a personas dependientes en instituciones se inserten en el mundo laboral próximamente. Además, 51 mujeres se beneficiaron de alguna o varias tutorías individualizadas de competencias digitales aplicadas al empleo y 34 mujeres han recibido apoyo psicológico a través de sesiones individuales y grupales.
Las personas que participaron activamente en los distintos itinerarios fueron en aumento desde sus comienzos hasta la última fase del Plan y respecto a las inserciones laborales, objetivo primordial de este proyecto, también fueron evolucionando positivamente: diez en 2017, once en 2018, treinta y tres en 2019 y veintiséis en la última edición.
4- DEBILIDADES Y FORTALEZAS
- FORTALEZAS:
Se
promovieron e impulsaron por parte del Ayuntamiento de Valladolid las siguientes
medidas, entre otras, para contribuir al éxito del Plan:
-Se desarrollaron jornadas dirigidas a
empresas para la presentación de buenas prácticas de empresas Socialmente
Responsables que han incorporado personas en riesgo de exclusión social por
causas de género y víctimas de violencia machista.
-Se realizaron campañas de visibilización
+ prospección de empleo + difusión de ayudas a la contratación mediante
reuniones directas con empresas
-Se realizaron campañas de difusión y
animación a la participación incidiendo fundamentalmente en los puntos de
atención a estos colectivos además de su difusión al público en general.
- Se facilitó el acceso a las acciones
formativas mediante diversas modalidades de apoyo: ayudas para el transporte,
incentivos a la participación y aprovechamiento de las acciones formativas,
suministro del material necesario y otras medidas de conciliación con la vida
familiar como servicio de canguros o de cuidado de mayores.
Partiendo de mi desconocimiento en la puesta en práctica de este tipo de medidas, imagino que estas iniciativas es difícil que lleguen a todo el colectivo al que se dirigen. El hecho de que se trate de colectivos en riesgo de exclusión o vulnerables por determinadas circunstancias, muchas veces supone que ese tipo de circunstancias que les hacen vulnerables, les impiden tener acceso a determinada información, como puede ser la existencia de este plan de inserción objeto de mi análisis, información relacionada con ayudas económicas, asesoramiento jurídico, etc.
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